La comerciante y ama de casa Marilen Ortiz Hernández, de 44 años, ofrendó su vida por salvar a su sobrino Billy Sebastián Torres Hernández, de 10 años, pero ambos murieron calcinados en la madrugada de este viernes por un incendio que afectó una casa de un tercer piso, en la calle 77 con carrera 64, barrio San Martín, del municipio de Bello.
Según relató Wber Zapata, secretario de Gestión del Riesgo de ese municipio del norte del Valle de Aburrá, el niño en la noche del jueves quiso dormir en el mezanine de la casa y allí lo sorprendió la conflagración, que se inició a la 1:47 a.m. de este viernes.
Su tía Marilen, quien vivía de una miscelánea que tenía en la primera planta de la edificación, al ver la situación intentó rescatarlo de las llamas, pero el material combustible del techo y del cielorraso avivó el fuego que hizo colapsar el mezanine con ambas personas.
Anotó el funcionario que se investigan las causas que originaron la conflagración, que destruyó un tercer piso y el mezanine de madera, que estaba en una especie de cuarto piso.
Una primera versión de los residentes en esta edificación fue que hace algunos días tuvieron un escape de gas, por lo que al lugar llegaron operativos de Empresas Públicas de Medellín para investigar el estado de la red así como de la acometida de la energía.
En la vivienda afectada había otras 5 personas que lograron salir ilesas.
Concluyó Zapata que la estructura de la edificación donde vive una misma familia será analizada por ingenieros expertos para saber en qué condiciones se encuentra, pero habrá que demoler lo que quedó del tercer piso y del mezanine.