Un niño de 11 años murió el pasado sábado en la localidad de Suba, en Bogotá, tras consumir un dulce que presuntamente contenía un fuerte alucinógeno conocido como LSD, que un desconocido le habría dado en la calle, según contó la madre del pequeño, Yuli Andrea Gordillo.
La tragedia que vivieron los familiares de David Santiago Bedoya Gordillo fue aterradora, pues no se imaginaron que un dulce le ocasionaría la muerte.
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“Mi hermana y mi sobrina estaban en su puesto de tintos, allí llegó un sujeto que les regaló unas gomitas por lo que ellas las trajeron a la casa y las dejaron en la mesa”, fue parte del relato que entregó la mamá del pequeño a los medios de comunicación de la capital colombiana.
David y su hermana habrían visto los dulces y decidieron comérselos. Minutos después empezó el angustiante momento que vivieron.
“Paula no siento la cara, tengo frío, llame a mi papá”, fueron algunas de las palabras que dijo el niño a su hermana, según el relato de Yuli. “Mi hermana llegó hasta la casa, allí trataron de ayudar a mi hijo, lo metieron a la ducha para cortar el efecto de la droga, pues se dieron cuenta que había sido el dulce, de allí llevaron a mi pequeño al hospital pero llegó sin signos vitales”, añadió.
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En el centro asistencial el pequeño fue reanimado, pero debido a las afectaciones recayó y finalmente falleció.
El cuerpo del niño fue entregado a los padres, mientras las autoridades competentes avanzan en la investigación, para así poder establecer el origen de dichas gomas que le habrían causado la muerte a este pequeño.
¿Qué es el LSD?
LSD son las siglas en inglés de la dietilamida de ácido lisérgico. Es un alucinógeno que se presenta en forma de polvo blanco, líquido claro sin color o tabletas, que normalmente se ingiere vía oral.
Según el sitio web especializado medineplus.gov, “El LSD es una droga psicoactiva. Eso significa que actúa sobre el cerebro (sistema nervioso central) y cambia su estado de ánimo, su comportamiento y la manera en la que se relaciona con el mundo a su alrededor. El LSD afecta la manera en la que actúa un químico cerebral llamado serotonina. La serotonina ayuda a controlar el comportamiento, el estado de ánimo, los sentidos y el pensamiento”.