¡Buena esa! Dejaron de ser habitantes de calle para volverse operadores terapéuticos

Con constancia y disciplina, 7 personas que fueron habitantes de calle lograron darle un rumbo a sus vidas y ahora, tras terminar su proceso de […]

/ FOTO: CAMILO SUÁREZ.

Con constancia y disciplina, 7 personas que fueron habitantes de calle lograron darle un rumbo a sus vidas y ahora, tras terminar su proceso de resocialización, cumplieron el sueño de graduarse como operadores terapéuticos.

Todos ellos realizaron y finalizaron un diplomado de 6 meses en el Instituto Pedagógico de Psicología (IPSI), con el cual adquirieron las herramientas y los conocimientos para desempeñarse como educadores y sensibilizar a otros que se encuentren en esta condición para que mejoren su calidad de vida.

No fue de la noche a la mañana. Se trató de todo un proceso, en el que debieron poner todo su esfuerzo para transformar sus vidas, dejar atrás su experiencia en las calles y aprovechar una segunda oportunidad de reintegrarse a la sociedad.

Claudia Janeth, una de las personas que ahora es operadora terapéutica. /FOTO: ALCALDÍA DE MEDELLÍN.

De hecho, previamente debieron terminar el bachillerato y ellos mismos asumieron el costo del diplomado con recursos obtenidos a través de trabajo y ahorro que obtuvieron gracias a la estrategia de Retribución Social, que los vincula 2 días a la semana en talleres ocupacionales de madera, confecciones, jardinería y gestores de vida, actividades con las que se busca enseñarles artes y oficios, y darles la posibilidad de adquirir autonomía económica.

“Estamos felices por estas 7 personas, no solo porque terminaron sus estudios de diplomado, sino también porque ahora están capacitados para trabajar por rescatar más vidas de ciudadanos que están en las calles”.

Señaló la secretaria de Inclusión Social, Familia y Derechos Humanos, Mónica Alejandra Gómez.

El componente de Resocialización forma parte del Sistema de Atención al Habitante de Calle Adulto, de la Alcaldía de Medellín, que hoy cuenta con 57 integrantes activos, quienes pueden capacitarse y acceder a opciones que les permitan tener fuentes de ingresos económicos o de estudio, tal como lo hicieron los ahora graduandos.

“Con gran satisfacción hemos llegado hasta este punto de nuestras vidas. Para mí es muy importante llegar a este logro porque ha sido con un esfuerzo muy grande y ha sido parte de mi proyecto de vida, el que comencé a plantear en mi proceso. Y, a pesar de que ha habido dificultades, he sabido mantenerme firme y limpio”

Gabriel Felipe Montoya, uno de los nuevos operadores terapéuticos.

Sus hojas de vida fueron enviadas a distintos contratistas del Sistema de Atención al Habitante de Calle, para que puedan acceder al mundo laboral y continuar su proceso de autosostenimiento.

Ellos podrán desempeñarse como educadores en cualquiera de los componentes de dicho sistema, como atención básica, granja Somos Gente, albergues, atención al egresado, entre otros, que buscan ofrecer un trato digno a la población habitante de calle, acercarla la oferta institucional y sentar las bases de la recuperación de sus proyectos de vida.