La historia detrás del crimen de madre e hijo en Copacabana, por el que cayó esta semana el presunto asesino

“Sentimos un alivio”. Con esas palabras Fáber Mauricio Ramírez describió el sentir de él y su familia, luego de la captura de Luis Eduardo López […]

Ellos eran María Angélica Ramírez Lora y su hijo Jerónimo López Ramírez. /FOTO: CORTESÍA.

“Sentimos un alivio”. Con esas palabras Fáber Mauricio Ramírez describió el sentir de él y su familia, luego de la captura de Luis Eduardo López Cortés, señalado por las autoridades de ser el responsable del crimen de su compañera sentimental, María Angélica Ramírez Lora, y el hijo de esta mujer, Jerónimo López Ramírez, ocurrido en el municipio de Copacabana.

“En esos momentos uno siente satisfacción porque por un lado la justicia si hizo su trabajo, si actuó. Y por otro lado un poquito de descanso porque por lo menos sabemos que el tipo va a pagar por lo que hizo, que va a recibir su castigo, que va ser judicializado y que por lo menos un crimen tan atroz como este no se va a quedar en la impunidad”.

Le dijo a Q’HUBO Faber Mauricio Ramírez, hermana de María Angélica Ramírez Lora.

Y es que los hechos que hoy en día tienen tras las rejas a Luis Eduardo, de 53 años de edad, ocurrieron el pasado 9 de diciembre en el barrio Miraflores.

María Angélica Ramírez Lora junto con su hijo, Jerónimo López Ramírez, En la imagen aparece Luis Eduardo López, quien fuera compañero sentimental de ella y padre del joven asesinado. /FOTO: CORTESÍA.

Parientes de la mujer de 40 años y del adolescente de 14, llegaron esa mañana a la residencia porque no tenían noticia de ellos. Subieron las escalas hasta el segundo piso, abrieron la puerta y encontraron a madre e hijo sin vida en una habitación y con múltiples lesiones en diferentes partes del cuerpo que les fueron producidas con una almádana.

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Durante la inspección judicial, los investigadores, por medio de información aportada por habitantes del sector, conocieron que el día antes había llegado al inmueble López Cortés, además que lo habían visto salir horas antes que encontraran los cuerpos. Esta información fue clave para que las autoridades lo identificaran como sospechoso.

/FOTO: ANDRÉS FELIPE OSORIO GARCÍA.

Horas más tarde, un juzgado de Copacabana libró una orden de captura en contra de este padre de familia por los delitos de feminicidio agravado y homicidio agravado.

La relación

Fáber contó que Luis Eduardo era un hombre celoso. “Nosotros siempre lo percibimos a él como un tipo celoso, pero nunca, por lo menos nuestra hermana, nos manifestó signos de violencia o por lo menos no nos dimos cuenta”, contó.

María Angélica Ramírez Lora y Luis Eduardo López Cortés. /FOTO: CORTESÍA.

Sin embargo meses antes de la muerte de Maria Angélica, está última les manifestó que los celos se agudizaron, pero hasta ahí, no les describió nada más. Eso habría desencadenado en la separación de la pareja.

En cuanto a la relación con Jerónimo, reveló que no fue buena. “Él con el niño no tuvo una muy buena relación porque el tipo tomaba mucho trago y al niño no le gustaba mucho eso. Ellos siempre fueron muy distanciados por el tema del licor”, detalló Fáber.

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Agregó que él y su familia eran más de planes de campo, de restaurantes, visitas a centros comerciales, actividades que no fueron para nada atractivas para Luis Eduardo, quien prefería refugiarse en el alcohol y las fiestas.

Un mes y medio duro

Los días posteriores al crimen fueron difíciles y no dejaron de hacer cosas para clamar justicia y colaborar con las autoridades en la búsqueda del sospechoso. Hicieron marchas, repartieron volantes, tuvieron constante comunicación con las autoridades y tocaron puertas.

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El resultado final llegó la tarde del lunes, 24 de enero, cuando el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía y la Sijín de la Policía Nacional capturaron en un municipio del Oriente Antioqueño a López Cortés.

El sospechoso fue judicializado el martes, 25 de enero, no aceptó los cargos y un juez de la república le impuso medida de aseguramiento en centro carcelario.