A ver si el problema es no jugar en el Atanasio

Después de un partido en el Atanasio Girardot contra Santa Fe, en el inicio del Apertura, donde se dejó una sensación de que el Verde volvería a […]

/ FOTO: DIMAYOR.

Después de un partido en el Atanasio Girardot contra Santa Fe, en el inicio del Apertura, donde se dejó una sensación de que el Verde volvería a las épocas gloriosas, al jugar contra Tolima y La Equidad por fuera del Coloso de la 74 se dejó una imagen triste y una preocupación entre su afición.

Esta tarde, a las 6:05 p.m., Nacional intentará mostrar que se siente cómodo jugando en su cancha y buscará, ante el Pereira, volver a ese juego y al nivel que le dio alegría a su afición como pasó con el actual subcampeón, así fuera con las tribunas vacías.

Para el juego contra el matecaña, Alexandre Guimaraes podrá contar con su nueva contratación, el delantero Alex Castro, quien proviene del Cruz Azul mexicano, situación que fue destacada por el entrenador costarricense.

“Después lo que tenemos que trabajar para el próximo partido contra Pereira, con la incorporación de Castro, la profundidad por izquierda a derecha y las combinaciones que estoy buscando para tener más volumen sobre la media cancha del rival“, dijo Guimaraes.

Alexandre Guimaraes

Más contundencia

Sobre el bajo nivel mostrado en los 2 partidos por fuera, el técnico verdolaga atribuye esto a la falta de definición en los últimos metros del área rival y en su cancha, contra un equipo cuya lucha está enfocada en sumar puntos para evitar el descenso, buscará concretar las opciones de gol, aprovechando la calidad de la delantera que tiene.

“Creo que si se suman los tres partidos que hemos jugado, lo que nos ha faltado principalmente la contundencia del primer juego. Hemos avanzado a mi modo de ver, pude ver a (Jefferson) Duque con Jonatan (Álvez) arriba y como el equipo se adaptaba a esa situación. Debemos mirar hacia adelante”, remarcó el técnico.

Guimaraes podrá contar con toda su nómina para intentar silenciar las críticas de las últimas jornadas y mantener el invicto contra un equipo con el que no pierde desde el 2008.

Pero ahora se viene el reto del verdolaga de mostrar para qué está hecho en su cancha, y de una vez por todas exhibir el juego que su hinchada, desde sus casas, espera ver después de varios años de sinsabores.